Las Fiestas siempre se anuncian por la alegría que deberían traer. Aunque muchas personas con las que he hablado – gente en general felices y exitosos – comentaban sobre la prisa, el estrés, el agobio, el gasto excesivo y el agotamiento. También, de las grandes expectativas para la temporada – regalos idóneos, celebraciones perfectas de Nochevieja, las obligaciones (y confusiones) familiares y las siempre glorificadas, Propósitos para el Año Nuevo.
Desde luego, esta temporada es una buena oportunidad para reflexionar sobre nosotros mismos, nuestras circunstancias y nuestras esperanzas. Sin embargo, este ejercicio saludable, a menudo se convierte en una presión de culpa y vergüenza, poco razonable, de establecer metas que muchos se sienten obligados a hacer, pero pocos cumplen de una manera que produzca un cambio significativo de largo plazo.
No estoy diciendo que no deberíamos fijar metas – cada persona puede probar y elegir libremente las estrategias que funcionan para ellos. Pero esa es la clave: lo que funciona.
Debido a mi experiencia, muchos de nosotros sabemos QUÉ queremos cambiar (hacer más ejercicio), e incluso POR QUÉ (la salud, perder peso, reducir el estrés, ser mas atractivo), pero el CÓMO a menudo se nos escapa. Reconocemos la importancia de la fuerza de voluntad y de la acción en si misma (ir al gimnasio). Pero a menudo hay elementos más fundamentales en juego que sabotean el esfuerzo – y entenderlos puede ser la clave para conseguir los resultados reales.
Así que te presento el concepto de, lo que yo llamo, los LEDs. Es mi sencillo resumen de una recopilación de investigaciones dedicadas a explorar las raíces de la verdadera felicidad, el éxito, la plenitud y la serenidad – y lo necesario para conseguirlos. Para una fantástica exploración de estos temas, te recomiendo el libro de Brene Brown «Los dones de la imperfección» (léelo, te traerá alivio, claridad y alegría real).
LED significa:
- Límites – tus límites naturales: físicos, mentales, emocionales, interpersonales o cualquier otro. ¿Dónde te sientes tenso, estirado o abrumado? Según la investigación de Brene, la capacidad de conocer, establecer y respetar tus propios límites es una clave vital para reducir el estrés, mejorar la relación con uno mismo y los demás, y aumentar los fundamentos de amor: la compasión y la conexión.
- Expectativas – la mayoría de nosotros luchamos, ante todo, con las expectativas que ponemos en nosotros mismos. Por lo tanto, enseñamos a los demás a juzgarnos por las mismas normas insaciables que son difíciles de alcanzar. ¿Sobre qué te estás acosando a ti mismo? ¿Qué debes ser? Más delgado, guapo, rico, exitoso, un mejor padre, un mejor profesional… la lista continúa. La epidemia de nunca ser lo suficiente o hacer lo suficiente nos impide no sólo saber, sino disfrutar de la gratitud por las cosas bellas que ya tenemos o que ya somos.
No se trata de no reconocer dónde queremos mejorar – se trata de rechazar una mentalidad que, en el fondo, cree que somos menos personas y menos dignos de amor y respeto, por no haber alcanzado ya nuestros objetivos.
¿Suena dramático? Muchas veces no lo pensamos de forma tan explícita. Pero puede afectar cómo nos percibimos y presentamos, actuamos, tratamos a los demás y el enfoque de nuestro futuro. Por no mencionar la ansiedad, el miedo y el descontento, que no tiene nada que ver con las sanas estrategias de cambio, sino con lo que nos mantiene pegados a sentirnos crónicamente insuficientes.
- Deseos – igual que la importancia de establecer y cumplir con nuestros respectivos límites, tenemos que aprender a pedir lo que necesitamos, de forma segura, respetuosa pero con firmeza. Muy pocas personas que conozca – no importa lo grandes que sean – han conseguido esta habilidad. Yo incluida. ¿Qué estas negando a ti mismo?
Pedir ayuda, expresar emociones (especialmente las más difíciles o poco claras), insistir en el tiempo para nosotros mismos y nuestros seres queridos o expresar tus propias decisiones y preferencias.
Lo que a menudo se produce como consecuencia son momentos difíciles o dolorosos cuando estos deseos salen en el momento equivocado o con la emoción excesiva por haberlos aguantado demasiado tiempo. Los que los reciben luego se sienten a veces culpados o inadecuados por no haberlos visto, reconocido o cumplido antes, y surgen problemas en la comunicación. Si no es peor, como el resentimiento y la distancia.
Todos hemos estado allí y muchos de nosotros todavía estamos, pero como con todos los LEDs, con algo de tiempo, reflexión y acciones positivas, las cosas pueden cambiar.
En el fondo, los LEDs se tratan de sacar y hacer brillar tu verdadero yo y sentir que esto está bien, que eres suficiente. El mundo puede responder de varias maneras, algunas útiles y otras no, pero el resultado final te hará mucho más feliz y más tranquilo en tu vida y en tus relaciones.
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(Tu LEDs Super Guía para un Excelente Año Nuevo)
He diseñado este corto «Workbook» (libro de ejercicios) para ayudarte aclarar tus propios Limites, Expectativas y Deseos, con el fin de crear objetivos inteligentes y manejables para conseguir resultados duraderos. Y por favor, lee el libro de Brene porque lo explica todo de forma razonable, asequible y fácil de entender… no importa cuál sea tu situación.
