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En remoto ¿Trabajo en remoto? Está en la mente de todos. Pero, ¿cómo evolucionamos inteligentemente hacia tal tendencia a largo plazo… o incluso, hacia una cultura de “Remote 1st”?

La reciente pandemia en curso ha desafiado profundamente nuestra forma de trabajar. Tanto solos como en equipo.

Primero, nos quejamos y pateamos, por la dificultad de adaptarnos al trabajo en remoto. Solo para llegar al otro lado, más de un año después, donde la mayoría de empleados desean ahora opciones de trabajo en remoto más flexibles.

No desean, sino que EXIGEN.

Pero, ¿cómo tomar la decisión correcta para tu organización?

¿O para ti mismo, como empleado?

 

Porque después de la dolorosa transición que se nos impuso, muchos también comenzaron a ver los sorprendentes BENEFICIOS del trabajo en remoto:

  • Comodidades de trabajar en casa (una vez debidamente establecidos).
  • Conexión más profunda con los seres queridos.
  • Mejor equilibrio entre el trabajo y la vida personal.
  • Ahorro de tiempo y costes económicos.
  • Los diversos costos de mantener espacios físicos profesionales.
  • …Sin mencionar el beneficio MASIVO para nuestro precioso medio ambiente.

 

Es quizás este último elemento el que hace que sea especialmente difícil para las empresas insistir en volver a la “antigua normalidad” de los desplazamientos incesantes, los viajes aéreos, la presencia en la oficina y demás.

Nos queda poco tiempo para revertir el daño casi irreversible que hemos hecho a nuestro planeta hasta ahora.

Priorizar la responsabilidad de proteger nuestro mundo natural ya no es un valor “que es bueno tener” en el repertorio de tu empresa. Se está convirtiendo cada vez más en una ética fundamental e “imprescindible” para el éxito de TODAS las organizaciones futuras.

Por no hablar, de la piedra angular de la competitividad.

Los jóvenes talentos, los futuros líderes de nuestra sociedad, lo están buscando seriamente. Tanto por el componente ético que representa, como por el impacto que tendría en la calidad de su vida laboral y personal.

Además, las instituciones geopolíticas de todo el mundo se están movilizando para garantizar el cumplimiento de esta prioridad fundamental.

 

Por lo tanto, si tú o tu organización, aún no estáis pensando en formas de mejorar la manera de trabajar a este respecto, te arriesgas a sufrir daños importantes:

1) Perder clientes.

2) Perder talento de alto rendimiento.

3) Menguar tu competitividad en el mercado.

4) Costos innecesarios que perjudican tu sostenibilidad.

5) Sin mencionar las posibles repercusiones legales.

 

Nosotros, en NEV Coaching & Consulting, ya nos hemos subido a este tren.

Estamos trabajando con empresas para respaldar sus esfuerzos de gestión del cambio y evolucionar hacia una organización “Remote 1st”. O algún híbrido apropiado para ellas.

Gracias a un querido cliente y sus ideas visionarias, este tema es mucho más real. Y, por supuesto, más tangible la “experiencia interna” de cómo las organizaciones competitivas pueden hacer cambios significativos, incluso pequeños, que mejorarían MÁSIVAMENTE su éxito interno y externo.

Hay mucho que implica este tipo de transición, pero nuevamente, se pueden dar pequeños pasos inteligentes, contigo y tu equipo, casi de inmediato.

Es comprensible que ciertos tipos de trabajo no se prestan a este enfoque. Pero muchos lo hacen, al menos en parte. Y explorar estas opciones de manera abierta y estratégica es una de las mejores cosas que puedes hacer por tu equipo y tu empresa en este momento.

En esta publicación, nos gustaría cubrir las primeras preguntas clave de lo que significa trabajar hacia una cultura de Remote 1st. Además de los mejores pasos que puedes seguir para comenzar.

 

¿Qué ES una Cultura Remote 1st”?

En definitiva, es una forma de trabajar que promueve la posibilidad de permitir que TODOS los empleados trabajen con mayor flexibilidad y conciliación. Además, optimizando el rendimiento y la eficacia global de la organización.

 

Hay una serie de pilares básicos para una cultura de Remote 1st exitosa, pero los 3 principales son los siguientes:

1) Documentación de la empresa responsable y sensata.

TODA la fuerza laboral participa en la documentación rigurosa de todos los procesos y resultados principales de la empresa. Para el beneficio del aprendizaje compartido. Y evitar así, repeticiones, pérdidas de tiempo y recursos. Maximizando así el funcionamiento eficiente y eficaz de TODOS.

 

2) Comunicación asincrónica con encuentros sincrónicos SIGNIFICATIVOS.

Las operaciones tácticas de rutina (la mayoría) se ejecutan de tal manera que las personas se conectan de manera oportuna y responsable en torno a los objetivos de trabajo, PERO sin tener que estar siempre juntos en las reuniones, de forma remota o en persona.

Esto depende en gran medida de 1), así como de la capacidad de gestionar con éxito a tus empleados y equipos en torno a indicadores clave de éxito (KPI) predeterminados, acordados, bien comunicados y medidos.

Cuando los temas se vuelven complejos o sensibles, o la comunicación directa agrega un valor VERDADERO (¡como el teambuilding!) los compromisos sincrónicos (al mismo tiempo) se programan y se optimizan mucho más.

 

3) Cultura sin juicios y de colaboración.

Esto significa que las PREGUNTAS y dudas de todo tipo son siempre bienvenidas, siempre que los empleados hagan su debida diligencia. Aprovechar proactivamente el creciente conocimiento compartido y la documentación de la empresa (ver 1) Y CONTRIBUIR a ello.

Participan activamente para asumir la responsabilidad, buscar soluciones, apoyarse mutuamente e innovar hacia mejores resultados, en beneficio de TODOS.

 

Aquí tienes nuestro resumen más completo de las claves para una exitosa organización Remote 1st:

Trabajar en remoto

Si estás pensando que esto no es posible, consulta el Remote PlayBook de GitLab para obtener información valiosa de una empresa que vive, respira y tiene ÉXITO. En definitiva, que está triunfando absolutamente de esta manera.

 

¿Cómo te inicias en el concepto de Remote 1st?

Incluso si tu empresa no está preparada y está sufriendo. O si trabajar en remoto no es la “opción adecuada” para tu tipo de operación, definitivamente puedes aprender y crear oportunidades para pequeños cambios con esta opción.

Porque seamos honestos aquí: es hacia donde va el mundo, cada día más, nos guste o no. Así que no te quedes atrás.

 

Aquí hay algunas reflexiones iniciales para hacer (como líder de la empresa o empleado):

1) ¿Qué estás ganando en remoto? ¿Qué estas perdiendo?

Dentro de tu sector particular, circunstancias y visión de éxito, ¿cómo impacta tu día a día la creación de más flexibilidad, equilibrio entre la vida personal y laboral y mejor profesionalidad?

¿Cómo se sentirá tu equipo? ¿Cómo te sentirás TÚ?

¿Qué operaciones deben mantenerse en persona o al menos directamente sincrónicas?

¿Qué operaciones, cuando se reestructuran y perfeccionan adecuadamente, pueden volverse asincrónicas?

Se estratégico, abierto y creativo.

El éxito NUNCA viene haciendo siempre lo mismo.

 

2) ¿Cuál es tu OBJETIVO PRINCIPAL?

Conéctate con tu GENTE. Conéctate con tus NÚMEROS y conéctate con tus FORMAS DE TRABAJAR, interna y externamente.

Una vez que tengas esa claridad, entendiendo que el “mundo del trabajo” ESTÁ cambiando, especialmente con la pandemia, ¿cómo puedes unir los dos conceptos?

SIEMPRE hay una respuesta. Pero si insistes en ignorarla, bloquearla o combatirla, tus resultados lo mostrarán.

Además, para ayudarte a reflexionar sobre la forma en que está cambiando el “mundo del trabajo”, consulta nuestro anterior NEVBlog “Entorno VUCA. Cómo elevar y gestionar a tu equipo y tu negocio durante una crisis.”

 

3) Una Cultura Remote 1st pide lo que ya NECESITAS y QUIERES.

Aquí está lo increíble: TODAS las cosas necesarias para trabajar HACIA alguna forma de cultura Remote 1st, son las mismas cosas que SIEMPRE has querido para/y de tu empresa:

  • Más compromiso, responsabilidad y control por parte de tu equipo.
  • Desarrollo de talento que sea VERDADERAMENTE claro, coherente, justo y motivador, para que tu gente pueda seguir creciendo y ascendiendo.
  • Procesos de negocio debidamente detallados y documentados, de forma unificada. Y por lo tanto EJECUTADOS, con mayor éxito.
  • Agilidad, eficiencia y eficacia en la consecución de los objetivos. Como organización y hasta el último y querido empleado.
  • ¡Una cultura que fomenta la apertura, la amabilidad, la creatividad, el compartir y la colaboración en todas sus operaciones diarias, desafíos y CELEBRACIONES!

 

Te entiendo. Sé que puede sonar como una “utopía”. No lo es.

Hay muchos ejemplos de organizaciones de todo el mundo que ya lo están haciendo: con ÉXITO.

Cada nueva gran innovación, cada nuevo cambio positivo, tendrá MUCHOS altibajos, en el camino hacia el cumplimiento realmente manejable, exitoso y sostenible a largo plazo.

Pero tenemos dos opciones:

  • Mantenernos igual. Patear, gritar y luchar contra el progreso (en detrimento nuestro).
  • O encontrar formas INTELIGENTES de adaptarse, evolucionar y VOLAR.

¿Cuál eliges?

El mundo es tuyo.

 

No dudes en contactarnos con tus preguntas e ideas particulares. Eso es lo que nos gusta y siempre estamos MUY FELICES de escucharte y apoyarte.

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Nevena Vujosevic

Autor Nevena Vujosevic

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